La salud oral incide directamente en la del resto del organismo. Cuidarla es clave para prevenir enfermedades.
Dolor de muelas, un flemón, un diente con caries o unas encías inflamadas obligan a visitar al dentista. Una vez resuelto el problema, el paciente se va a casa. No obstante, en algunos casos, estas afecciones alertan de otras patologías que nada tienen que ver con la boca.
La realidad es que la salud bucal está estrechamente relacionada con la de todo el organismo, aunque no se haya tenido en cuenta. Ahora empieza a tomarse más en serio esta especialidad, que debería incluirse en la atención primaria, como ocurre con la pediatría o la ginecología.
En 2021, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó que la odontología se centrara más en la prevención y se integrara con los servicios de atención primaria, ya que las enfermedades bucales suponen un problema de salud pública mundial que afecta a casi 3.500 millones de personas en todo el mundo.
Conexión entre la salud oral y la del organismo
Aunque se ha demostrado el vínculo entre ambas, aún no existe una concienciación real sobre la importancia que tiene una buena salud bucodental en el organismo. Así, la caries, la pérdida de dientes y la gingivitis y otras enfermedades periodontales están relacionadas con las cardiopatías.
Un estudio de la Universidad de Uppsala (Suecia) demostró que los pacientes con enfermedad coronaria que habían perdido más dientes tenían mayor riesgo de sufrir un derrame cerebral, un ataque cardíaco o una muerte cardiovascular.
Por su parte, la periodontitis (un trastorno de las encías que provoca que estas puedan separarse de los dientes) está asociada a patologías como un infarto, un ictus y gastritis. La periodontitis grave también aumenta el riesgo de cáncer, como concluyó una investigación de la Universidad de Boston (EE.UU.).
A pesar de la conexión boca-cuerpo, aún no existe una atención integral que mejore la salud de las personas. El problema es que muchos médicos apenas tienen formación en salud bucodental y los consultorios dentales no suelen formar parte de los hospitales y clínicas médicas.
Claves para cuidar la salud oral
Demostradas las conexiones entre la salud bucal y el resto del organismo, es esencial adquirir unos hábitos que ayuden a tener un buen ecosistema bucodental. Ponga en práctica estos nueve consejos para tener una boca y unos dientes sanos:
Modere el consumo de azúcar. De esta manera, reducirá la probabilidad de padecer caries o problemas en las encías. El mismo efecto ejercen los hidratos de carbono, por lo que debería moderar su ingesta.
Lleve siempre un cepillo de dientes. En muchos casos, los picoteos entre horas y fuera de casa son habituales. Para prevenir la placa bacteriana, que empieza a formarse a los 20 minutos de comer, lleve un cepillo de dientes y utilícelo después de cada comida.
Cepíllese con cuidado. Dedique entre dos y tres minutos a hacerlo, ejerciendo una suave presión sobre los dientes y realizando pequeños movimientos circulares hacia delante y hacia atrás. Tras cada lavado, enjuague su cepillo con agua y guárdelo en posición vertical, sin cubrirlo.
Cambie su cepillo cada tres meses. O antes, si las cerdas se ven gastadas. Elija un cepillo dental suave y con el cabezal redondeado para evitar dañar su esmalte. Utilizar un cepillo eléctrico también es una opción muy eficaz.
Escoja dentífricos con flúor, ya que esta sustancia previene las caries. También existen dentífricos con agua termal, que reequilibrar el ecosistema bucal y aporta sales minerales y oligoelementos para una buena mineralización de los dientes. Asimismo, hágase enjuagues bucales a diatio, sobre todo, antes de acostarse.
Use hilo dental y esprays interdentales. El hilo dental elimina los restos de alimentos en los espacios interdentales. Intente utilizarlo después de cada cepillado. Otra opción efectiva son los esprays interdentales que, además de limpiar profundamente, reducen la inflamación de las encías.
Cuide sus encías. Si las tiene muy sensibles, use un dentífrico especial, cepillos de cerdas blandas y un enjuague especifico para encías.
Evite el tabaco. Disminuye la secreción de saliva, favoreciendo la aparición de bacterias y desequilibrando el ecosistema oral. Fumar produce halitosis y aumenta el riesgo de caries y enfermedades de las encías, como periodontitis.
Visite a su odontólogo. Revise su boca, al menos, una vez al año, y hágase una limpieza bucal completa cada 6 o 12 meses.
Como ve, la salud bucodental repercute en el estado general del organismo. Cuide su boca siguiendo las pautas anteriores y recuerde seguir una dieta rica en frutas y verduras y baja en azúcares para prevenir caries y problemas de encías. Hacer deporte de forma regular también contribuye al bienestar general.
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Fuentes:
Tooth loss is independently associated with poor outcomes in stable coronary heart disease. Ola Vedin, Emil Hagström, Andrzej Budaj, Stephan Denchev et al. European Journal of Preventive Cardiology. May 2016. https://doi.org/10.1177/2047487315621978
Periodontal Disease Assessed Using Clinical Dental Measurements and Cancer Risk in the ARIC Study. Dominique S. Michaud, Jiayun Lu, Alexandra Y. Peacock-Villada, John R. Barber et al. Journal of the National Cancer Institute. August 2018. Doi: 10.1093/jnci/djx278
¿Por qué no se considera la salud bucodental parte de la atención médica primaria? Lola Butcher. El País. Mayo 2024. https://elpais.com/salud-y-bienestar/2024-05-27/por-que-no-se-considera-la-salud-bucodental-parte-de-la-atencion-medica-primaria.html
Consejos para disfrutar de una buena salud bucodental durante el verano. Consejo General de Dentistas de España. Julio 2023. https://consejodentistas.es/consejos-para-disfrutar-de-una-buena-salud-bucodental-durante-el-verano/
