Rodearse de gente, ser generoso y optimista y caminar por la naturaleza estimulan la felicidad. Descubra más.
Aristóteles dijo: «La felicidad depende de nosotros mismos». Si bien es cierto que el carácter y la actitud influyen, la genética tiene mucho que ver. Investigadores iraníes hallaron que entre el 35 y el 50% de nuestra felicidad la determinan los genes. El resto, el contexto social y económico y nuestros hábitos.
Teniendo en cuenta que la mitad depende de nosotros, se puede decir que ser felices está en nuestras manos. Incluso podemos trabajar ciertos aspectos para lograrlo, como asegura la Universidad de Bristol (Reino Unido).
La prestigiosa facultad es una de las primeras del mundo en poner en marcha un curso sobre Ciencia de la Felicidad, basado en la psicología positiva. En él, se enseña a ser feliz, poniendo en práctica lo que han descubierto algunas investigaciones científicas.
Claves para ser feliz
Aunque la felicidad no es un estado permanente, podemos disfrutar el máximo de nuestro bienestar emocional. La Universidad de Bristol destaca estos aspectos que nos ayudarán a ser más felices. Incorpórelos a su vida de forma definitiva y benefíciese de ellos:
Hable con personas desconocidas. No se trata de intentar hacer amigos por la calle, sino de tener la capacidad de dirigirnos a un extraño, en contextos determinados. Una reunión, un curso, un centro deportivo o un supermercado son espacios que nos permiten crear nuevos vínculos sociales.
Evite la soledad. No sólo causa infelicidad, sino también acelera el envejecimiento. Se ha demostrado que la soledad no deseada debilita las defensas y aumenta la probabilidad de enfermar. Para evitarlo, busque un entorno social en el que se sienta cómodo.
Sea bondadoso. Ayudar a los demás aporta una satisfacción y bienestar. Es una evidencia que la bondad lleva a la felicidad y que la gente que se porta bien con los demás es más feliz que las personas egoístas. Al final, ser bondadoso proporciona más beneficios a quien lo es que a quien lo recibe.
Sea generoso. Regalar algo o tener detalles con quienes nos rodean activa el centro de recompensa del cerebro y nos hace sentir bien. Da más felicidad regalar que gastar dinero en uno mismo. ¡Compruébelo!
Utilice las redes sociales. Hágalo con moderación y sentido común para evitar su efecto negativo. Bien utilizadas, las redes sociales permiten conectar con personas con intereses comunes y establecer relaciones.
Intente ser optimista. No siempre es fácil, ni las circunstancias favorables. Aun así, el optimismo alarga la esperanza de vida y mejora la capacidad de ser felices. La gente optimista consigue más cosas, porque arriesga más.
Rodéese de verde (y azul). Caminar por la naturaleza o por la playa desactiva la parte del cerebro donde se mueven los pensamientos negativos que nos repetimos constantemente. Un estudio publicado en la revista Nature halló que quienes vivían en zonas verdes o costeras tenían un bienestar general más positivo.
La investigación, llevada a cabo a más de 16.000 personas de 18 países, también concluyó que quienes visitaban con frecuencia espacios verdes o azules con fines recreativos se sentían mejor y sufrían menos angustia mental.
Otros hábitos que potencian la felicidad
A las pautas de la Universidad de Bristol se suman otras, que también nos hacen sentir bien, como hablarnos en positivo. En vez de reprocharnos algo cuando las cosas no salen bien, es mejor dirigirnos a nosotros en segunda persona para tomar más distancia de las emociones.
Sociabilizar, abrazar a los demás y hacer deporte con frecuencia ayuda a liberar oxitocina y serotonina, hormonas de la felicidad.
Como ve, ser más felices está en nuestras manos. Llevar a cabo los consejos anteriores fomenta el bienestar y la satisfacción personal. También contribuyen a ello la actividad física, seguir una dieta sana y equilibrada u descansar lo suficiente.
En Nueva Mutua Sanitaria contamos con los mejores psicólogos y psiquiatras, que pueden ayudarle a conocer y controlar sus emociones.
Fuentes:
Happiness & Health: The Biological Factors- Systematic Review Article. Dariush Dfarhud, Mariam Malmir and Mohammad Khanahmadi. Iran Journal of Public Health. November 2014. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4449495/
Associations between green/blue spaces and mental health across 18 countries. Mathew P. White, Lewis R. Elliott, James Grellier et al. Nature. April 2021. https://doi.org/10.1038/s41598-021-87675-0
La Universidad de Bristol comparte los 8 aspectos que hay que trabajar para aprender a ser feliz. Pablo Cubí del Amo. Saber vivir. Agosto 2024. https://www.sabervivirtv.com/bienestar/la-felicidad-se-puede-aprender-pero-hay-que-trabajar-estos-aspectos-segun-la-universidad-de-bristol_10134