Esta raíz de origen mexicano es muy beneficiosa para el estómago, los huesos, los músculos y el corazón. Descubra más.
Aunque tiene un nombre curioso y desconocido para la gran mayoría, el tupinambo existe desde tiempos inmemorables. Este tubérculo, de grandes flores amarillas y textura crujiente, tiene una corteza amarillenta o violácea, su interior es blanco y su sabor, entre dulce y anuezado, similar a una alcachofa trufada.
Unas características genuinas para una raíz de forma alargada e irregular, similar a la del jengibre. Si tupinambo o tupinambur (como también se le conoce) suena peculiar, también lo es alcachofa de Jerusalén, otro término con el que se conoce a este tubérculo.
Un nombre que nada tiene que ver con su origen, ya que procede de México. Tupinambo significa «planta que excava como un topo» y, durante años, se empleó tanto para el ganado como para las personas. Incluso ayudó a paliar la escasez de alimentos después de la Segunda Guerra Mundial.
Beneficios del tupinambo
Considerado un superalimento, este tubérculo de origen americano (muy consumido en Francia y Canadá) es una fuente de virtudes para el organismo. Descubra sus principales beneficios:
Mejora la salud digestiva. El tupinambo contiene inulina, una sustancia que actúa como un prebiótico y contribuye a mejorar la microbiota y a mantener una buena salud digestiva. Además, es saciante y rico en fibra, por lo que ayuda a combatir el estreñimiento y favorece el tránsito intestinal.
Reduce el colesterol. La alcachofa de Jerusalén contiene niacina, una vitamina que ayuda a reducir los niveles de colesterol y azúcar en sangre. De ahí que se conozca como la patata diabética.
Bajo en calorías. Unos 100 gramos de tupinambo apenas aportan 25 calorías, la mitad de lo que aporta, en la misma cantidad, manzanas, kiwis y mandarinas. Por ello, pueden tomarlo quienes quieran perder peso.
Aliado para los huesos. La inulina y la fibra ayudan a absorber el calcio. De esta manera, aumenta la densidad de los huesos y se previene el riesgo de osteoporosis.
Efecto antioxidante. Por sus propiedades antitumorales, el tupinambo es un refuerzo natural para el sistema inmunológico.
Músculos en buen estado. Además de magnesio, calcio y sodio, esta raíz contiene potasio, un mineral esencial en el buen funcionamiento del sistema nervioso y el muscular.
Tres recetas con tupinambo
Conocidas sus virtudes, es hora de utilizarlo en la cocina. Antes, ha de saber que el tupinambo puede comerse crudo (previamente lavado) o cocinado al horno, salteado o al vapor.
En cuanto a las elaboraciones más comunes, esta raíz se emplea en tortillas, como guarnición de carnes y pescados, en salsas y en propuestas veganas como el hummus.
Tortilla de tupinambo
Lave, pele y corte en rodajas un tupinambo grande. Póngalo a calentar en una sartén con un poco de aceite, hasta que quede dorado. Después, deje que empape el aceite en un plato con papel de cocina. Mientras, bata 5 huevos, añada una pizca de sal y el tupinambo. Cuando la tortilla esté dorada, dele la vuelta y sírvala.
Tupinambo al horno con hierbas y parmesano
Precaliente el horno a 200 grados. Lave y pele dos tupinambos y póngalos en un bol grande, con ajo picado, aceite de oliva, sal, pimienta, tomillo y orégano. Coloque los tupinambos en una bandeja y hornee media hora o hasta que estén ligeramente dorados. Como toque final, espolvoree un poco de queso parmesano rallado sobre los tupinambos los últimos 5 minutos de cocción. Retírelos del horno y sirva como guarnición.
Crema de tupinambo y calabacín
Pele y corte a dados dos tupinambos, un puerro y medio calabacín. Pele y limpie dos alcachofas, trocéelas y reserva en agua fría, con unas ramas de perejil. Ponga en un cazo el puerro y el calabacín y dórelos. Añada los tupinambos, cubra con agua, tape y deje cocinar a fuego suave hasta que estén tiernos.
Una vez cocinados, añada un poco de nata, salpimente y triture hasta que quede una masa homogénea. A continuación, dore las alcachofas en una sartén con unas gotas de aceite. Finalmente, reparta en bols la crema de tupinambo y calabacín con unas avellanas tostadas y los trozos de alcachofa por encima.
Como ve, el tupinambo es un tubérculo bajo en calorías y digestivo. Incorpórelo a su dieta, en la que no deben faltar frutas, verduras y legumbres. Recuerde hacer deporte con frecuencia y dormir suficientes horas.
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Fuentes:
Tupinambo o topinambur, así son las propiedades de la alcachofa de Jerusalén. El diario vasco. Marzo 2023. https://www.diariovasco.com/gastronomia/despensa/conoces-propiedades-alcachofa-20190414095036-nt.html?ref=https%3A%2F%2Fwww.diariovasco.com%2Fgastronomia%2Fdespensa%2Fconoces-propiedades-alcachofa-20190414095036-nt.html
Tupinambo, más saludable que la patata. Jesús Lens. El Correo. Marzo 2024. https://www.elcorreo.com/jantour/despensa/tupinambo-saludable-patata-20240323185042-nt.html?ref=https%3A%2F%2Fwww.elcorreo.com%2Fjantour%2Fdespensa%2Ftupinambo-saludable-patata-20240323185042-nt.html
Innova en tus recetas con este superalimento rico en fibra que ayuda a perder peso. Faro de Vigo. Abril 2024. https://www.farodevigo.es/ocio/gastronomia/2024/04/26/recta-tupinambo-facil-dv-101594590.html