Probar otras actividades, recordar tus propios récords o estrenar ropa nueva pueden ayudarte a ponerte en marcha.
Como sabes, el ejercicio físico nos reporta numerosos beneficios para nuestro bienestar. Ayuda a mantener en forma el cerebro y el corazón, y a mejorar nuestro estado de ánimo.
Además, el ejercicio refuerza el sistema inmunológico, favorece un peso saludable y es un antídoto natural contra el estrés y la ansiedad.
Sin embargo, aún conociendo todos sus beneficios, muchas personas siguen negándose a practicarlo, o lo abandonan al poco tiempo de haber empezado. ¿Pereza? ¿Trabajo? ¿Falta de energía? Deja la excusas y ponte en modo on. Si te falta motivación para activarte, esto te ayudará.
Cómo motivarse para hacer ejercicio
La falta de ganas, las largas jornadas laborales o las obligaciones familiares son algunas de las típicas barreras que nos ponemos nosotros mismos.
Te proponemos 10 maneras de aparcarlas y empezar a moverte.
- Ropa nueva. Cómprate unas mallas o pantalones y una camiseta nueva y sentirás emoción por estrenarlas lo antes posible. Es un fenómeno psicológico demostrado.
- Zapatillas adecuadas. El calzado es esencial para sentirte cómodo y evitar lesiones. Pregunta a un experto qué zapatillas son las más adecuadas para tu entrenamiento y hazte con un par.
- Sal de la rutina. Si sueles correr en cinta, cambia de actividad o combínala con otra que te haga salir de tu zona de confort. La variedad es excelente para el cuerpo y el cerebro.
- Preparación previa. Deja lista la mochila con todo lo necesario o pon a la vista el atuendo deportivo. Visualizarlo mantendrá tu motivación y evitará que procrastines.
- Esfuérzate un poco más. Cuando creas que has acabado, agrega 5 minutos extra a tu rutina deportiva. Desafíate, aplaude tus logros y te sentirás mucho mejor.
- No solo en el gym. Muévete cada día, aparca el coche lejos, ve andando a los sitios y sube y baja escaleras. Si tienes tiempo, haz una actividad física al aire libre, aunque sean 15 minutos.
- A tu ritmo. Las clases dirigidas son muy prácticas, pero seguir un orden puede ser aburrido. La Universidad de Nevada halló que tomar el control de la sesión motiva a seguir entrenando.
- Céntrate en tu salud y felicidad. Esto se conoce como motivación intrínseca y se centra en los beneficios que harán que tengas una imagen corporal positiva de ti mismo.
- Haz minientrenamientos. Cuando te agacches o levantes algo, toma consciencia. Hacerlo correctamente te ayudará. Repite los movimientos y conviértelos en minirrutinas de entreno.
- Buenos recuerdos. Pensar en un récord que batiste o en un ejercicio que lograste hacer es motivador. Según los estudios, los recuerdos positivos del deporte ayudan a ser más activos.
Como ves, encontrar la motivación para empezar a hacer ejercicio y convertirlo en un hábito es más sencillo de lo que parece. Ver resultados y sentirte mejor te impulsará a seguir y plantearte otros retos.
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Fuentes:
Associations of Physical Activity and β-Amyloid With Longitudinal Cognition and Neurodegeneration in Clinically Normal Older Adults. Rabin JS, Klein H, Kirn DR, et al. JAMA Neurology. June 2019. DOI:10.1001/jamaneurol.2019.1879
Choosing to exercise more: Small choices increase exercise engagement. Gabriele Wulf, Heidi E. Freitas and Richard D. Tandy. Psychology of Sport and Exercise. May 2014. https://doi.org/10.1016/j.psychsport.2014.01.007
10 fitness motivation tricks to get you up and moving. Alyssa Sparacino. Real Simple. February 2022. https://www.realsimple.com/health/fitness-exercise/workouts/fitness-motivation
