Slow life: así es el método que te ayudará a ser feliz

Bajar el ritmo, dedicar más tiempo a nuestras aficiones y comer de forma consciente nos hacen sentir mejor.

 

El trabajo, las obligaciones familiares, las prisas por llegar a todo y cumplir con la agenda diaria nos llevan a vivir de forma acelerada y con estrés. Muchas veces, lo urgente no nos deja ver lo realmente importante, que se reduce a las pequeñas cosas del día a día y a disfrutar de nuestros seres queridos.

Hacer una pausa nos hará tomar conciencia de la realidad y nos ayudará a prestar más atención al momento presente. Es lo que se conoce como slow life (vida lenta), una filosofía de vida más pausada y respetuosa con nuestros ritmos naturales.

¿En qué consiste la slow life?

Como hemos adelantado, este movimiento mundial promueve la desaceleración de nuestro estilo de vida actual. El objetivo es aparcar el ritmo vertiginoso, que muchas veces nos acaba provocando estrés y ansiedad crónica, e intentar disfrutar más de cada momento.

Llevar un estilo de vida lento no siempre es fácil. Empezando por el nombre, ya que el concepto lento suele tener connotaciones negativas y se asocia a vago. La slow life no tiene nada que ver con eso: vivir lento no significa hacerlo de manera irresponsable, sino prestando atención al aquí y el ahora.

Para lograrlo, es importante tener en cuenta los principios del movimiento slow, que implica anteponer la calidad a la cantidad y saborear los minutos, en lugar de contarlos.

Un objetivo que podemos lograr en un mes, siguiendo un método ideado por el escritor y periodista canadiense Carl Honoré, autor del libro Elogio de la lentitud (RBA). Honoré establece una serie de ejercicios, estructurados en 4 semanas

Su metodología consiste en autoevaluarnos cada semana para saber en qué punto de nuestra vida estamos. Detallamos el proceso por semanas:

Semana 1: baja el ritmo

Empieza a desacelerar. Para ello, de vez en cuando, interrumpe lo que estás haciendo y mira a qué velocidad lo llevas a cabo. Pregúntate si lo harías mejor y lo disfrutarías más a un ritmo menor. Si la respuesta es sí, respira profundamente tres veces y reanuda la tarea, más despacio.

Otro aspecto que te ayudará a bajar el ritmo es reducir el uso del móvil. No es sencillo, ya que es adictivo y nos distrae. Apártate de él de forma progresiva: ponlo en modo avión una hora al día, desactiva las notificaciones o queda con un amigo y déjalo en casa.

Apunta en un diario cómo te has sentido al hacer las tareas más despacio y haber desconectado del móvil. La actitud reflexiva es clave en la filosofía slow.

Semana 2: disfruta de tus aficiones

Te ayudará a relajarte, estar alegre y ser más creativo. Ya sea hacer deporte, un curso de pintura o de cocina japonesa o plantar un huerto urbano. Haz actividades que te diviertan y que no estén relacionadas con el uso de las pantallas, como la televisión o los videojuegos. De nuevo, escribe en un diario tus sensaciones.

Semana 3: cuida tu cuerpo

La forma de movernos y de comer centran el objetivo de esta semana. Callejea sin rumbo fijo por tu ciudad o por un entorno natural e incorpora 5 o 10 minutos de actividad física a tu vida diaria. En cuanto a la dieta, dedica más tiempo a cocinar y saborea lo que comes, tomando conciencia de cada bocado.

Semana 4: cambia tu manera de trabajar

Levántate 10 minutos antes, con todo listo del día anterior, para evitar salir a toda prisa y empezar el día estresado. En la medida de lo posible, revisa lo que escribes, sobre todo los correos, para evitar disgustos.

Asimismo, ves haciendo pausas a lo largo del día: mira por la ventana, estira las piernas, disfruta de un café o dedica unos minutos a hacer respiraciones pausadas. También es importante que evites la multitarea para evitar colapsarte. Es más productivo hacer primero una cosa y, luego, otra.

 

Pasadas las cuatro semanas, y diario en mano, haz un repaso a todo lo que has hecho en este tiempo y valora si contribuye a que tu ritmo de vida sea más lento y saludable.

Vinculada a la slow life está la slow food, que representa una vuelta a los orígenes, el respeto por la materia prima y el consumo de alimentos ecológicos, locales y de temporada.

Como ves, la vida lenta es una filosofía que nos invita a bajar el ritmo para disfrutar más y mejor de nuestro día a día. Las pautas anteriores te ayudarán a valorar lo realmente importante y a ser más feliz. Recuerda seguir una dieta sana y equilibrada, hacer deporte con regularidad y dormir suficientes horas.

En Nueva Mutua Sanitaria contamos con los mejores psicólogos y psiquiatras, que pueden ayudarte a conocer y controlar tus emociones.

 

Fuentes:

Elogio de la lentitud (edición 20º aniversario). RBA Libros. Carl Honoré. https://www.rbalibros.com/rba-no-ficcion/elogio-de-la-lentitud-edicion-20-aniversario_7332

Slow life, el método de un mes (paso a paso) que te ayuda a valorar lo importante y ser más feliz. Eva Mimbrero. Saber vivir. Enero 2024. https://www.sabervivirtv.com/psicologia-y-bienestar/slow-life-metodo-un-mes-ayuda-valorar-importante-ser-mas-feliz_6759

Slow life, la forma más simple y efectiva de tener una vida feliz. Tamara Izquierdo. Welife. Septiembre 2022. https://www.welife.es/mente/slow-life-la-forma-mas-simple-y-efectiva-de-tener-una-vida-feliz-consejos-practicos/

Slow life, otra manera de ser feliz. La mente es maravillosa. https://lamenteesmaravillosa.com/slow-life-otra-manera-de-ser-feliz/

¡Suscribete a nuestra Newsletter!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *